viernes, 1 de noviembre de 2013

Mis novias




-Buenos días, queria comprar una cama grande y me ha encantado ésa.
-Buenos días. Si quiere le puedo enseñar más, que las hay aún mayores.
-No, no hace falta, gracias, le aseguro que esta es la cama de mis sueños. Por cierto, yo vivo lejos. ¿Cuánto me costaría el transporte de la cama hasta mi casa?
-Pues es gratis.
-Ah, muy bien. Oiga, me chifla todo en esta tienda, incluido usted, ji, ji, ji. Creo que conmigo ya tiene una cliente segura.
-Muchas gracias, usted parece la cliente perfecta, je, je.
-Bueno, y a todo esto, ¿qué vale la cama?
-Pues quinientos.
-Mmm... ¿Y podría llevármela hoy y pagar la semana que viene? Es que gastarme ese dinero ahora mismo me viene fatal.
-Me temo que eso no es posible, lo siento.
-Vaya. ¿Y alguna rebaja me podría hacer?
-Sí, claro. Mire, se la dejo rebajada al 50%.
-Vaya. ¿No podría ser al 99%?
-De nuevo me temo que eso tampoco es posible, lo siento.
-Pues qué fastidio.
-Perdone pero, ¿seguro que le interesa a usted la cama?
-Mire, la verdad es que me voy porque necesito estar sola y pensar sobre esto. Y no me mire así, que me agobia.


Y así son siempre mis relaciones con mis sucesivas novias.


jueves, 24 de octubre de 2013

Deseo concedido




Justo Enmedio era una de esas personas que procuran ponerse delante de la puerta del vagón del metro cuando éste llega a la parada, entorpeciendo todo lo posible el paso de los demás viajeros. Como se sentía superior al resto de la humanidad, permanecía impasible ante los ruegos y miradas de reproche de quienes querían bajar o subir al tren y apenas podían por estar él estorbando. "Perdone, ¿me deja pasar?", escuchaba una y otra vez mientras, sin moverse ni un milímetro, pensaba que si esa chusma quería pasar sería por encima de su cadáver.
Cuando esperaba la llegada del metro, se colocaba siempre lo más cerca que podía de las vías, casi en el borde del andén, para que le resultara más fácil su pertinaz tarea obstructiva. Lo tenía todo calculado. Todo salvo que aquel día coincidió en el mismo lugar con una señora que se comportaba de forma similar a él aunque de un modo más violento. El afán de aquella mujer, que atendía al nombre de Becerra Empellón y que por su edad podía ser la madre de Justo, era entrar siempre la primera nada más se abriera la puerta del vagón y así poder ocupar un asiento antes que nadie. Para lograr su propósito, no dudaba en embestir como un miura desbocado a todo el que se le pusiera por delante.
La casualidad quiso que Becerra apareciera en el andén en el momento en que el metro entraba en la estación, y que Justo estuviera exactamente en el punto al que ella se dirigía. La mujer avanzó con paso firme y veloz, apartando a todo el mundo a empujones. Ni frenó ella a tiempo, ni pudo hacerlo el conductor: Justo cayó a la vía y le pasó por encima el metro con toda la chusma dentro.

sábado, 12 de octubre de 2013

El dolor es más fuerte que la risa




Ayer me caí aparatosamente de culo en el trabajo cuando iba a hacer una radiografía a un paciente que había acudido de urgencia por un fuerte dolor de muelas. Mientras mis compañeras se partían de risa por el numerito, el paciente, sentado a mi lado, no movía ni un músculo.


miércoles, 25 de septiembre de 2013

La mala educación




Una mujer y su hija adolescente en la consulta del dentista. La mujer le reprocha con vehemencia a su hija que no se lave bien los dientes. Mientras tanto, de las axilas de la madre se desprende un intenso olor nauseabundo, perceptible a varios metros de distancia. “Es que contigo no hay manera, de verdad”, insiste la mujer en tanto su fuerte olor corporal va inundándolo todo...

 

jueves, 29 de agosto de 2013

Cuando Stalin "creó" Israel (II)


Antes de nada, hay que tener en cuenta que existe una primera parte.


En septiembre de 1951 Rudolf Slánský fue destituido de su puesto de secretario general del Partido Comunista de Checoslovaquia. Dos meses más tarde fue detenido junto a otros trece líderes. Once de ellos, incluido Slánský, eran judíos. Fueron interrogados y torturados durante todo un año. En noviembre de 1952 se celebró un juicio farsa estalinista y once de los acusados fueron condenados a la horca. Slánský fue declarado culpable de formar parte de una conspiración cuyos apelativos reunían todas las obsesiones del momento: trotskista, titoísta, sionista y estar al servicio del imperialismo estadounidense. Fue ejecutado en Praga el 3 de diciembre.



martes, 27 de agosto de 2013

Cuando Stalin "creó" Israel (I)


El antisemitismo es la herencia más peligrosa del canibalismo

Stalin, 1931


A pesar de la cita, Stalin siempre fue antisemita. Eso sí, durante la mayor parte de su vida mantuvo su antisemitismo más o menos oculto, con manifestaciones esporádicas y en privado del mismo, como cuando le prometió a Von Ribbentrop en 1939 que se desharía de los intelectuales judíos, o cuando envió diez años al Gulag al amante judío de su hija adolescente.

A pesar de sus sentimientos, tras la invasión nazi de la URSS Stalin decidió actuar con pragmatismo en relación a los judíos. De esa forma, creó el Comité Judío Antifascista y, lo más importante, apoyó todo lo que pudo la creación del Estado de Israel. Esto fue así hasta el punto de que personalidades importantes de Israel afirmaron después que el apoyo soviético durante su guerra de la independencia fue esencial para lograr el triunfo. Sin embargo, cuando quedó claro que Israel no se iba a colocar en la órbita soviética, Stalin se sintió traicionado, dio rienda suelta a sus recelos contra los judíos e inició una purga antisemita que sólo se detuvo con su muerte. No obstante, las relaciones entre el Bloque del Este e Israel quedarían ya envenenadas durante el resto de la Guerra Fría.

jueves, 22 de agosto de 2013

Il castrato



Stefano Dionisi en la película Farinelli, il castrato (1994), de Gérard Corbiau


"Ante todo, quiero dar las gracias a mis padres por este premio: si no me hubieran cohibido y despreciado tanto desde pequeño, seguramente yo no tendría esta voz".