viernes, 16 de octubre de 2015

El quinto día




Siempre he apreciado los viernes, claro, pero últimamente espero su llegada como agua de mayo, como una auténtica liberación. Aunque al alba no aparezca Gandalf por el Este, sino el sol, como en cualquier otro día. Viernes, qué palabra tan dulce, qué bien suena. Cuando me decida a tener un hijo lo concebiré en viernes. Incluso le llamaré Viernes, como el amiguete de Robinson Crusoe.

Que vivan los viernes.




miércoles, 14 de octubre de 2015

Tu propio negocio (III)




Parafraseando al escritor Alejandro Gándara, tener tu propio negocio viene a ser como sufrir mal de amores o marearse en un barco: te sientes morir pero a los demás les haces mucha gracia.


lunes, 5 de octubre de 2015

Obviedades habituales




En el capítulo de hoy tenemos subir arriba, bajar abajo y ha muerto de una parada cardiorrespiratoria.

Seguiremos informando.


domingo, 4 de octubre de 2015

Tu propio negocio (II)


 

Gary Cooper en la película Solo ante el peligro (1952), de Fred Zinnemann


Tranquilo, ten paciencia; esto es difícil solo al principio, ya lo verás, me dicen. Mientras tanto, sigo esquivando las balas a duras penas y sin saber hacia dónde disparar.




sábado, 3 de octubre de 2015

Volver




Anoche soñé que volvía a Peguerinos.

De pequeño iba mucho a Peguerinos con mi familia. A veces de pícnic, otras a buscar leña para la chimenea del apartamento que mis abuelos tenían en San Lorenzo del Escorial. Recuerdo la serpenteante carretera que subía por el monte Abantos, un pantano y un enorme muro de rocas, con alguna en lo alto que parecía mantener un difícil equilibrio. También había una fuente y una acequia con ranas. Solía ver vacas y caballos pastando tranquilos, y paseaba por un bosque de pinos sembrado de helechos y atravesado por un riachuelo.

Anoche soñé que volvía a Peguerinos. Y bueno, hoy he vuelto.




viernes, 25 de septiembre de 2015

El amor, idiota




Una de las calamidades que me ha traído esto de ser de ciencias es que mi vida amorosa, hasta ahora, siempre se ha regido según el método científico: prueba y error.




martes, 22 de septiembre de 2015

lunes, 21 de septiembre de 2015

El maltrato




-Buenas. Me gustaría saber cuánto me costaría despreciarle, humillarle, gritarle o insultarle un rato.
-Oh, por favor, nada en absoluto. Encima de que se toma la molestia.
-Ah, perfecto. Pues vamos allá.




viernes, 18 de septiembre de 2015

Las madres solas




Las ves en la compra, por la calle, en el parque, en el hospital, con su hijo en brazos o empujando el cochecito, haciendo mil cosas a la vez con una naturalidad increíble. Cuidan de su niño, juegan con él, lo educan, lo ven crecer, trabajan, luchan, ligan, salen adelante, y sonríen siempre como si los problemas no importaran.

Qué tiernas y a la vez qué admirables me parecen. Ojalá tuvieran menos obstáculos y más motivos para sonreír de verdad.




jueves, 17 de septiembre de 2015

De madrugada




Es madrugada y estamos en la cama. Afuera llueve y sopla el viento, señal inequívoca de que el verano se ha ido y con él las vacaciones, por desgracia. Sueño que navego en un frágil esquife sin más compañía que las olas, haciendo frente a los elementos que amenazan con echarme al agua y que me ahogue irremediablemente. Suena un ruido estridente y pienso que el cielo ha caído sobre mi cabeza, como si fuera un galo de la aldea de Astérix, pero no es más que la alarma de tu móvil, que me despierta sin ninguna consideración. La cosa me fastidia bastante, porque me cuesta mucho conciliar el sueño últimamente. Bueno, digamos que me cuesta mucho conciliar el sueño en general. Siento el impulso de decirte que hagas el maldito favor de no dejar la alarma puesta a esas horas nunca jamás, al menos cuando duermas conmigo, pero entonces abro los ojos y te veo. Te veo cómo te incorporas con tu carita de dormida y apagas tranquilamente ese molesto sonido, y cómo luego te acercas y me abrazas. Sin pronunciar una palabra nos besamos, nos tocamos por todas partes y, claro, terminamos follando como si no hubiera un mañana. Después seguimos abrazados y nos volvemos a dormir. Y así, sin querer, evitamos una discusión absurda transformando el hastío y la tensión en sexo y ternura. Sin darnos cuenta conseguimos que los roces sean caricias y no peleas.

Y al día siguiente pienso, como otras veces, en la suerte que tengo de estar contigo.




miércoles, 16 de septiembre de 2015

sábado, 12 de septiembre de 2015

Hablar demasiado



El Tío Sam mandando callar durante la Segunda Guerra Mundial (por León Helguera)


Hay miles de cosas que se dicen muy a la ligera. Como "te quiero" o "tengo mi propio negocio", por ejemplo. Antes de abrir la boca uno debería asegurarse de que son ciertas, o de lo contrario puede dar lugar a tremendas confusiones, engañándose a sí mismo y, lo que es peor, a los demás.

Querer a alguien o llevar un negocio no son tareas fáciles ni baladíes. Ilusionarse con ello sí. Pero recordemos la primera definición que nos da la Real Academia Española de la palabra ilusión:

Concepto, imagen o representación sin verdadera realidad, sugeridos por la imaginación o causados por engaño de los sentidos.

Qué tentador es dejarse querer a cambio solo de bonitas palabras, preocupándonos mucho más de cuánto recibimos que de lo que damos. Qué sugerente es pensar que uno puede forrarse de pasta sin depender de nadie, compatibilizando sin problemas la vida personal y la profesional, teniendo libertad de horarios, dedicándole un mínimo esfuerzo, incluso trabajando desde casa. Qué fácil es vivir en el mundo de las ilusiones, es decir, el de la fantasía y las mentiras. Por un tiempo, eso sí, porque los engaños no suele durar para siempre.

Si en la guerra hay que callar para no revelar la verdad al enemigo, en muchas ocasiones conviene mantener la boca cerrada para no mentirnos a nosotros mismos ni estafar a los que tenemos al lado.


PD: Otro día hablaré del negocio del amor, que es un tema con mucha enjundia. 




viernes, 11 de septiembre de 2015

La historia clínica




-¿Toma algún medicamento?
-No. Bueno, una pastilla para dormir.
-¿Y ninguno más?
-Bueno, y para el colesterol. Y luego la de la tensión. Y para la próstata. Y la del ácido úrico.
-¿Fuma?
-No. Seis o siete cigarrillos al día, como mucho.
-¿Bebe?
-No. 
-¿Nada?
-Bueno, lo normal: un poco de vino con las comidas. Algún carajillo por las mañanas. Y alguna cerveza antes de comer, o por la tarde. Pero vamos, nada. Y luego el fin de semana sí bebo algo más. Pero poca cosa.

Tenemos a un paciente polimedicado, fumador y alcohólico crónico que padece un serio trastrono de negación de la realidad.

Todo un clásico.


domingo, 6 de septiembre de 2015

Tu propio negocio




Tratar de ser un empresario de éxito -de forma honrada y legal- es fascinante. Te da poderes sobrenaturales, como por ejemplo la capacidad de tener sudores fríos a pesar de que haga un calor asfixiante. Uno se siente como Alfredo Linguini, el inexperto chaval de la peli Ratatouille, aunque sin una rata en la cabeza que le diga lo que tiene que hacer.

Tratar de ser un empresario de éxito de momento me está suponiendo un montón de queyaesdecires, a saber:

-Dormir menos (que ya es decir).

-Más estrés (que ya es decir).

-Muchos más gastos (que ya es decir) sin que aumenten las ganancias (que ya es decir).

-Darle más vueltas aún a todo lo que tengo en la cabeza (que ya es decir).

-Y hablando de la cabeza, que se me caiga más el pelo (que ya es decir).


 ¿Valdrá la pena? 




jueves, 27 de agosto de 2015

Supremacía




El otro día, cuando volvía a casa, me encontré con una cucaracha en el rellano del ascensor. Me planté frente a ella. El animal trataba de huir desesperado empotrándose contra el friso, escarbando en un rincón, intentando trepar inútilmente por la pared. Por un momento me dio lástima, pero cedí a esa idea con la que nos criamos desde pequeños: las cucarachas son lo peor, son asquerosas y merecen la muerte. De modo que la pisé. Pero entonces ocurrió algo tremendo: no murió al primer golpe. Se quedó ahí, herida, moviendo sus patas en el aire como si tratara de agarrar la vida que se le escapaba. La pisé más veces, tres, cuatro, no recuerdo cuántas, hasta que expiró.

Este hecho aparentemente insignificante, tan habitual, me inquietó: ¿era realmente necesario matarla? ¿Me había hecho algo malo? ¿El mundo es mejor sin esa cucaracha? Quizá alguien opine que es muy ridículo todo esto, pero hay algo innegable, y es que la maté porque me creía infinitamente superior a ella, porque la despreciaba, vaya. No es algo de lo que sentirse precisamente orgulloso. Es más, el hecho de que solo consiguiera matarla tras varios intentos, mi torpeza para acabar con ella, hizo que me viniera de inmediato a la mente la imagen de (ATENCIÓN, LO QUE SIGUE ES UN DESTRIPE DE LA SEGUNDA TEMPORADA DE "JUEGO DE TRONOS") la desastrosa decapitación de Ser Rodrik Cassel por parte del inútil y lamentable Theon Greyjoy.




Recordé también la muerte del zarévich Alekséi a manos de los bolcheviques, un chaval de trece años, hemofílico, al que tuvieron que disparar varias veces porque se resistía a irse al otro barrio.

Qué fácil es acabar con la vida de los seres indefensos. Y qué brutal. Qué sádico. Aunque la víctima sea una cucaracha. Se me dirá que las cucarachas son plagas, que suponen un riesgo para nuestra salud, pero son excusas: las matamos porque nos dan asco, porque nos sentimos superiores y porque podemos hacerlo. Las matamos de forma masiva, como a las ratas y a otros seres "inferiores", y para ello empleamos venenos, gases tóxicos, lo que haga falta. Incluso echamos mano de profesionales para que lo hagan en nuestro lugar. Entonces las matamos a distancia porque es más cómodo, pero también porque en el fondo nos desagrada hacerlo, porque la distancia evita que eso de exterminar nos afecte. Algo así ocurre cuando se bombardea una ciudad, se mata fácilmente a mucha gente sin que los verdugos queden tocados psicológicamente porque no ven lo que están haciendo, no ven los cadáveres. Por ese motivo los nazis empezaron a asesinar a la gente en cámaras de gas, y eran algunos prisioneros los encargados de encerrar allí a las víctimas y luego de sacar los cuerpos. "Ojos que no ven...".

Se me alegará ahora que estoy desbarrando mucho, que las cucarachas no son personas. Ya, pero cuando los criminales asesinan en masa sienten exactamente lo mismo que cualquiera que decida acabar con estos insectos: asco y superioridad. Cuando aplasté a aquella cucaracha, lo hice con todo el peso del darwinismo social. Esto es lo turbador del asunto.

Matar al débil es cruel siempre, todos lo sabemos. No es más que abuso de poder, tiranía de los más fuertes, desprecio hacia los indefensos. Otra cosa es que a veces nos parezca aceptable, o dónde queramos colocar el límite de nuestra supuesta superioridad.




lunes, 24 de agosto de 2015

El viaje




De pequeño creía que la vida era un viaje hacia el infinito. Una excursión por el espacio y por el tiempo que nunca se detendría, que solo iría de un mundo a otro. Fantasías infantiles, la certeza de los sueños, la épica de los niños. Ahora pensaba en cambio que la vida estaba hecha de finales: el final de la niñez, el final de las películas, el final de las relaciones, el final del amor, el final de las vacaciones, el final de mes, el final del trabajo, el final de la propia vida. Bobadas de adulto.


miércoles, 12 de agosto de 2015

Las versiones




Cuando empezaron, cada uno tenía su versión del otro. Cuando acabaron también, aunque eran versiones distintas de las anteriores.

Y todas eran falsas.


lunes, 3 de agosto de 2015

Las hormonas




Vi la última peli de Pixar, Del revés (Inside out), una fábula sobre lo mucho que las emociones influyen en el comportamiento y en las decisiones de la gente. Me gustó, aunque eché de menos alguna referencia a las hormonas, esas reguladoras del funcionamiento de nuestro organismo, por un lado, pero también de las emociones, como todo el mundo sabe. Las hormonas son las auténticas artífices no solo de nuestras apetencias, sino también de nuestra alegría, de nuestra tristeza, de cómo va nuestro humor, vaya. Así, si estamos simpáticos, deprimidos, excitados, estresados, irascibles, histéricos, insoportables, de un humor de perros, si no hay dios que nos aguante, en definitiva, es responsabilidad de las hormonas, nunca nuestra. De ellas dependerían entonces en gran medida las relaciones interpersonales, los encuentros y desencuentros, los amores y los odios, las amistades y las rupturas, los polvos y los lodos. Toda esa locura.

Poderosa fuerza la de las hormonas es, que diría Yoda.


viernes, 17 de julio de 2015

Dejar atrás el rencor




Después de varias sesiones de yoga y de leer veinte libros de autoayuda, descubrió que era una gran persona, que tenía que luchar por cumplir sus sueños, que la vida merece la pena y que no se puede vivir con rencor. Así, mientras afilaba un cuchillo, decidió que en lugar de suicidarse abriéndose el vientre era mucho mejor abrir el de todas las personas que le habían decepcionado.


miércoles, 8 de julio de 2015

El moco




Estoy viéndole la boca a una mujer. Sarro a toneladas, muelas podridas, halitosis pestilente. "Es que soy muy marrana", reconoce. Y por si hiciera falta más confirmación, mientras contemplo el panorama se saca tranquilamente un moco, lo hace bolita y lo arroja a un lado. Me digo que menos mal que llevo gafas y mascarilla, porque le podría haber dado por tirármelo a la cara, situada a escasos centímetros de la suya.

Hay personas que dicen tener pánico al dentista. Yo tengo auténtico terror a algunos pacientes.


lunes, 29 de junio de 2015

Los malos recuerdos




El olvido, ese viejo remedio de la miseria humana

Alfred de Musset


-Buenos días. ¿Es el Banco de los Recuerdos?
-Sí, dígame.
-Llamaba porque quiero deshacerme de mis malos recuerdos, que me están volviendo loco. No sé, venderlos como si fueran acciones o algo así. Estoy harto de que me atormenten cada poco tiempo. 
-Me temo que eso no es posible, caballero. Para lo que usted pretende tendría que cancelar su Cuenta Memoria, y esto podría tener consecuencias trágicas.
-¿Qué consecuencias?
-Bueno, perdería toda su memoria. Tendría una demencia, vaya, y seguramente acabaría usted vegetando en una residencia hasta su muerte.
-¿Y no hay otra forma de borrar tantos recuerdos desagradables que me vienen a la cabeza cada dos por tres? Es que son insoportables.
-No. Verá, si usted quiere tener un hogar tiene que pagar una hipoteca. Del mismo modo, si quiere tener memoria tiene que soportar malos recuerdos. Así es el sistema. Y que conste que no le cobramos comisiones ni nada.
-Así es el sistema que tienen montado ustedes, querrá decir. Que los bancos son lo peor. Tendrían que nacionalizarlos todos.
-Nuestro banco ya ha sufrido intentos de nacionalización en unas cuantas ocasiones. En las dictaduras, concretamente. No querrá usted que el Gobierno controle su mente, ¿verdad? Tendría que estarnos muy agradecido por guardar tan celosamente sus recuerdos. Por otro lado, el Banco de los Recuerdos es una entidad milenaria que siempre ha cumplido su labor sin tacha alguna. Al ocuparnos asimismo de la memoria colectiva de los pueblos, realizamos una importante obra social, que es algo que está muy de moda entre los bancos en los últimos tiempos. Hemos llegado a acuerdos con distintos gobiernos en asuntos referidos a la memoria histórica, contribuyendo a que se haga justicia con el pasado y a que este no se repita. Así que fíjese. Fíjese, sea positivo y aprenda de la experiencia.
-Estoy perdido, ¿verdad?
-Así es.



miércoles, 24 de junio de 2015

Dialéctica




Una muchacha hablando con su novio:

-Cuando vuelvas me habré ido.
-No es así. Es: "cuando tú vas, yo vuelvo".
-No pretendía decir frases hechas. Es que te estoy dejando.
-Ah. ¿Y por qué?
-Verás, no es por ti, es por mí.
-Vaya, y eso que no pretendías decir frases hechas...


miércoles, 17 de junio de 2015

Meapilismo




Este artículo no pretende ser político, o al menos no defender una ideología concreta. Pretende más bien atacar la mojigatería que nos invade otra vez. O que nunca se ha terminado de ir.

Tras la llegada de Manuela Carmena a la alcaldía de Madrid el pasado 13 de junio estalló el escándalo: 



Guillermo Zapata, recién nombrado concejal de Cultura y Deportes, fue acusado de haber publicado varios tuits ofensivos hace cuatro años, cuando no era ni conocido. Se trataba de ciertos chistes sobre Irene Villa, Marta del Castillo y el Holocausto. No han importado ni los motivos por los que pudo hacer tal cosa -la defensa del humor negro-, ni que él no fuese autor de algunos de los chistes -motivo por el que los publicó entrecomillados-, y ni siquiera que la propia Irene Villa o el padre de Marta del Castillo hayan restado importancia a los famosos tuits: Zapata ha tenido que dimitir después de pedir disculpas a todo el mundo. Eso sí, continúa en el Ayuntamiento como concejal del distrito Fuencarral-El Pardo.

Obviamente todo esto ha formado parte de una campaña apoyada por varios partidos y medios de comunicación con claros objetivos políticos: atacar a Carmena y a su equipo de Ahora Madrid justo desde el inicio de su gestión en el Ayuntamiento. Pero el resultado ha sido desastroso más allá del punto de vista político. Me explico.

Según se ha sabido, otros miembros del equipo de Ahora Madrid tienen en su haber comentarios en redes sociales bastante peores, ya puestos y a mi modo de ver, que los de Zapata: por ejemplo los de Pablo Soto y Jorge García Castaño, concejales de Participación Ciudadana y del distrito Centro, respectivamente. O los de Alba López Mendiola. Pero ninguno de ellos ha sido apartado de su puesto como Zapata. Y si empezamos a tirar de hemeroteca nos encontramos que muchos cargos políticos, en especial del PP, tienen una buena colección de chistes, publicaciones, declaraciones y actos lamentables por los que nadie ha dimitido. Como aquello que escribió hace más de tres décadas un tal Mariano Rajoy, sin ir más lejos. Pero dejemos la hemeroteca, que sería un no parar, y vayamos al grano: ¿por qué se ha obligado a Zapata a dejar su cargo? Ya hemos visto que los mensajes con gracietas que aluden a una persona en concreto no parecen ser motivo suficiente para hacer renunciar a nadie: ni Irene Villa ni el padre de Marta del Castillo pidieron la dimisión del concejal. Sí lo hizo en cambio la Federación de Comunidades Judías de España, y por ahí ya empieza a asomar la patita el quid de la cuestión: el Holocausto.

No creo que haya nadie que desprecie más que yo a quienes niegan el Holocausto. Con la información de que se dispone hoy, cualquier persona mínimamente interesada en el tema que se empeñe en negar o disculpar aquel genocidio está claro de qué pie cojea: del mismo que Goebbels. Ahora bien, si por defender la verdad o los valores democráticos censuramos a quienes expresan una opinión, por muy repugnante que nos parezca, nos estaremos acercando precisamente a los que odian la libertad, a aquellos de los que pretendemos distanciarnos. Los argumentos absurdos hay que rebatirlos con argumentos fundados e inteligentes para dejar los primeros en evidencia, no prohibirlos, porque de hacerlo estaremos victimizando a sus autores, que es justo lo que buscan. Peor aún es que, llevados por una suerte de mesianismo democrático, prohibamos incluso hacer chistes sobre el genocidio judío, convirtiendo así la realidad del Holocausto en un dogma de fe. En una religión, vaya. Un hecho histórico que, como cualquier otro, está sujeto a debates entre investigadores e historiadores, revisiones y nuevos descubrimientos, pasa de esa forma no solo a ser una doctrina incontestable, sino incluso algo sagrado que no admite ni bromas. Un tabú.

Un tabú, por cierto, que puede volverse fácilmente contra quienes más lo instrumentalizan últimamente. Y en especial contra el PP, cuyos orígenes franquistas son muy serios y nadie puede negar. Pero dejemos la hemeroteca, sí.

Recuerdo que en mi infancia mis amigos y yo nos contábamos chistes sobre el Holocausto (¿por qué se suicidó Hitler?, porque le pasaron la factura del gas) y no ocurría nada, nadie se llevaba las manos a la cabeza. Eso no significaba que fuéramos furibundos antisemitas, claro: solo nos reíamos de un simple chiste. Parece ser que la mojigatería de nuevo campa a sus anchas en nuestra sociedad y que la ha tomado con este tema. Hemos ido hacia atrás y me parece preocupante: por lo visto a Zapata incluso le va a investigar la policía. Las consecuencias de todo este asunto pueden ser graves. La censura no solo parece avanzar en el terreno político, sino también en el cultural y en el social.

Incluso la propia Manuela Carmena ha defendido unos supuestos límites del humor. Cuando se estrenó La vita è bella -una comedia ambientada en el Holocausto- recuerdo haber leído en una entrevista a Roberto Benigni algo así como que el humor es el antídoto del fascismo. Es posible que lo sea. La censura desde luego no lo es.

PD: La última noticia que leo relacionada con este asunto es que Antonio Miguel Carmona, del PSOE, el cual apoyó la investidura de Carmena, ha pedido la dimisión de Rita Maestre, portavoz del Ayuntamiento, dado que está imputada por haber participado en una protesta ocurrida en una capilla hace cuatro años. Incluso se pide un año de cárcel para ella. En fin, decididamente con la religión hemos topado.

Actualizo la entrada con fecha 18-6-15 para enlazar un artículo de Irene Villa que la honra.




Los extraterrestres




Habitan entre nosotros. Creen en cosas absurdas como los chemtrails, la homeopatía, los gurús del desarrollo personal ("autoayuda", lo llaman), los guías espirituales, el éxito económico rápido y fácil, las conspiraciones mundiales, que las vacunas son perniciosas o que las limpiezas bucales dañan los dientes. Creen también en los extraterrestres, lo cual tiene mucha lógica porque ellos mismos lo son: su cuerpo está en la Tierra, pero su mente suele estar en la Luna, o incluso más lejos aún.

Habitan entre nosotros. Y cada vez son más.


lunes, 8 de junio de 2015

Un buen día




No, esto no tiene nada que ver con la canción de Los Planetas. Un buen día sería por ejemplo aquel en que abriera los ojos sin despertador y me levantara tranquilamente. En el que no oyera a los vecinos de arriba. En el que no hubiera atascos. En el que los conductores de las furgonetas no trataran de imitar al Equipo A y fueran a una velocidad normal, respetando las reglas de tráfico. En el que no me topara con ninguna persona maleducada. Un día sin discusiones, sin malas caras y sin prisas, sin malas noticias, en el que no hiciera ni frío ni calor. Un día en el que incluso me durmiera apaciblemente.

Podréis decir que soy un soñador, que cantaba John Lennon, pero qué bonito sería.




sábado, 23 de mayo de 2015

La función hace el órgano




Lamarck no estaba tan equivocado.

A menudo me dicen que físicamente aparento menos edad de la que tengo. Y no sé, pero me parece que el secreto de mi eterna juventud podría estar en que el 90% del tiempo me comporto como si efectivamente tuviera bastantes menos años. Como un crío, vaya.

Ni dietas, ni gimnasio, ni cremas, ni operaciones estéticas. Si quieres mantenerte joven, si quieres lograr el sueño de Dorian Gray, simplemente sé un chaval. Ay, si la Condesa Sangrienta levantara la cabeza.




lunes, 18 de mayo de 2015

Soledad




Mira la hora y sale con rapidez. Camina acelerado hasta que se detiene de repente porque se ha dado cuenta de algo: no hay prisa, puede ir tranquilo.

Nadie le está esperando.




sábado, 9 de mayo de 2015

Hartura




Es que estoy harto de los dentistas, me dice un tío al que no había visto en mi vida. Entonces pienso en responderle que por mi parte estoy harto de la gente maleducada como él. De idiotas que se dejan hacer cualquier chapuza en clínicas donde cobran barato, y que luego van a quejarse a quien no tiene culpa de nada. Y ya puestos, de la gente deshonesta, falsa. También de los bocazas, claro. Por eso mismo me callo y trato de buscar una solución a su problema.

Aunque sepa de antemano que no me va a hacer ni caso.




miércoles, 6 de mayo de 2015

Todas las personas honestas




Todas las personas honestas, de todas las etnias, de todas las ideas, decidieron unirse para cambiar el mundo. Pero, ay, sin saberlo confiaron en un criminal de la peor especie que se había camuflado entre ellas. Un ser indigno, falso y astuto que se rodeó de otros como él y que decidió no cambiar nada... salvo a ellas, a todas las personas honestas.

Porque, como bien sabían, en ese mundo no había lugar para la honestidad.


domingo, 3 de mayo de 2015

El Gulag de la vida




En Relatos de Kolymá, el escritor y superviviente del Gulag, Varlam Shalámov, cuenta que allí los cautivos tenían tres reglas: no creer, no temer y no pedir.

Como en la vida misma, vaya.


viernes, 1 de mayo de 2015

Una investigación súper secreta




Estoy realizando una investigación súper secreta y soy todo un experto en ello. Averiguo cosas sobre personas que no saben que existo, y también sobre otras que me conocen pero que ni se imaginan lo que hago. Paso desapercibido, disimulo, me hago pasar por quien no soy, me invento nuevas personalidades. Actúo solo, como Marlowe. Soy el perfecto agente secreto, James Bond sería un ridículo aprendiz a mi lado, y si la CIA me descubriera me contrataría sin duda. Aunque si efectivamente me descubriese significaría que no soy tan bueno, de modo que me alegro de que no lo haga.

El caso es que cuanto más destapo, menos me gusta. Pero así podré dejar a esas personas en evidencia, me digo. En evidencia frente a quién. Frente a la justicia. Pero si ellas mismas son sus propios jueces y ya hace tiempo que se absolvieron.

Como en una nueva versión de Serpico, investigo y sigo investigando, y percibo que este mundo en el que me muevo es cada vez peor. Y que no va a cambiar. Pero yo continúo investigando entre sudores fríos y fango, en el que me voy hundiendo lenta pero inexorablemente.




jueves, 30 de abril de 2015

Sobre el idealismo




Los políticos idealistas y utopistas fracasados son legión

Sebastian Haffner ("Anotaciones sobre Hitler")


En política, los idealistas que alcanzan la cima del éxito suelen ser unos tipos sin escrúpulos, unos carniceros, unos genocidas incluso. Ahí tenemos por ejemplo al Che Guevara, a Lenin o a Hitler. Claro que, por otro lado, al Che lo mataron, a Lenin trataron de asesinarle y Hitler se tuvo que suicidar para evitar que lo ahorcaran (hace hoy setenta años, sí).

En conclusión, si uno quiere triunfar de verdad en política (o en la vida en general), lo mejor es que sea pragmático. Y si logra formar parte de un Consejo (de Estado, de Administración...), mejor que mejor.


miércoles, 29 de abril de 2015

Coherencia




Vivir sin complicaciones no es vivir, repetía siempre.

Por eso, cuando las complicaciones le arruinaron la vida, eligió una forma sencilla de suicidarse.


domingo, 26 de abril de 2015

Espejismos




Hay personas muy inconsistentes. Frágiles. Durante un tiempo tratas con ellas, las escuchas, las ves, las tocas, pero un día desaparecen de repente, se volatilizan para siempre. No han muerto, pero tampoco responden a mensajes ni llamadas. Se desvanecen en vida. Vuelan cual pluma al viento, que decía Verdi. Sin ningún motivo aparente, sin ninguna explicación.

A veces, con el tiempo, puede parecer como si algunas de estas personas reaparecieran, pero no hay que hacerles caso porque no son más que espejismos.




El bombardeo de Guernica




Hace sesenta años recibimos una visita inesperada en Gernika. Muchos de nosotros éramos aún niños, y vinieron hombres de un país extranjero que no nos conocían y a los que no conocíamos. Ni siquiera nos odiaban, porque no les habíamos hecho nada, pero tampoco nos veían como éramos realmente. Porque ellos estaban arriba y nosotros abajo.

Declaración de testigos supervivientes del bombardeo de Guernica, publicada en el periódico alemán Pforzheimer Zeitung el 28 de abril de 1997


El último libro que leí referido específicamente al famoso bombardeo, del cual se cumple hoy el 78º aniversario, se titula precisamente “Gernika: El bombardeo”. Está escrito por el historiador vasco Imanol Villa y editado por la productora Idem y se publicó hace cinco años. En realidad se trata de la versión escrita del documental del mismo nombre, que apareció en 2007 con motivo del 70º aniversario del bombardeo, y que venía en DVD con el libro, por cierto.

Me preguntaréis: ¿dónde está la novedad? Pues en ningún sitio, la verdad, si exceptuamos algunas imágenes inéditas (entre las que hay escenas a color de Guernica justo después del bombardeo filmadas por el reportero yanqui Russell Palmer). La gracia es que relata la historia de forma muy clara y concisa, muy apta para todos los públicos. Y que es bastante objetivo. Basta con decir que cuenta con la colaboración de unos cuantos historiadores y expertos: los españoles Jesús Salas Larrazábal y Manuel Montero, los británicos Antony Beevor y Nicholas Rankin, los alemanes Klaus A. Maier y Stefanie Schüler-Springorum y el italiano Ferdinando Pedriali. También con la del Centro de Documentación Sobre el Bombardeo de Gernika, así como con el testimonio de varios supervivientes. Digamos que resume y expone las conclusiones de las investigaciones realizadas durante bastantes años. Y hay una cosa que resulta muy interesante, y es que el libro asume ciertas tesis a las que llegó Jesús Salas Larrazábal hace más de veinticinco años en su libro sobre el bombardeo (“Guernica”, Rialp, 1987), tesis que han sido despreciadas en ocasiones al ser tachado su autor de franquista. En fin, si tenemos en cuenta que el libro de Villa está patrocinado por el ayuntamiento de Gernika-Lumo y la Fundación Museo de la Paz de Gernika, y que en él colabora la Fundación Sabino Arana, no creo que sea muy factible tacharlo también de franquista.

Resumiendo los hechos:

El 25 de abril de 1937, la 1ª Brigada de Navarra (franquista) alcanzó el monte Oiz, entre Durango y Guernica. El general Mola prefería seguir avanzando hacia Durango, pero el teniente coronel Wolfram von Richthofen, Jefe de Estado Mayor de la Legión Cóndor –y primo del famoso Barón Rojo-, exasperado por la lentitud del avance de los sublevados, creía que se podría lograr un gran triunfo si se tomaba Guernica en un enérgico ataque de sur a norte y de este a oeste.


Von Richthofen 


Así, una gran parte de las fuerzas enemigas quedaría cercada en torno a Marquina y Lequeitio y no podría reforzar las posiciones defensivas de Bilbao. No obstante, Mola siguió en sus trece: primero Durango. Pero Von Richthofen tuvo la oportunidad de llevar a cabo sus planes cuando los mandos españoles pidieron destruir el puente de Guernica (o de Rentería) para dificultar la retirada de las tropas enemigas que, si pretendían replegarse hacia Bilbao, tendrían que pasar forzosamente por ahí.



El 26 de abril, poco antes de las cuatro y media de la tarde, un Dornir Do 17 alemán bombardeó el puente de Rentería sin alcanzarlo.

Minutos después, aparecieron tres bombarderos de la Aviación Legionaria italiana Savoia-Marchetti SM. 79. Llevaban instrucciones de bombardear el puente, pero no la población “por evidentes razones políticas”. El puente de nuevo quedó intacto, pero resultaron alcanzadas algunas casas y la estación de ferrocarril.

Poco antes de las cinco, dos Heinkel He 111 alemanes dejaron caer más bombas sobre el objetivo. Tampoco resultó destruido el puente.

A las 18:30 tuvo lugar el bombardeo decisivo. Von Richthofen decidió extralimitarse y ordenó destruir también las casas del este de Guernica. Para bloquear completamente al enemigo y poder cercarlo no bastaba con intentar destruir el puente, según él. La mejor forma de cerrarle el paso era destruir también las casas cercanas, así que los bombarderos fueron cargados con bombas incendiarias. Dada la poca precisión de los bombarderos de la época (de hecho, el puente finalmente no resultó destruido, como se temía el oficial alemán), Von Richthofen debía de saber que lo más probable era que se desatase un infierno abajo, en Guernica, cosa que no le importó en absoluto.

Se presentaron unos 20 Junkers Ju 52 alemanes, unos aviones de transporte adaptados al bombardeo. Los primeros lanzaron sus bombas cerca del puente, pero los siguientes bombardearon a ciegas, pues los tripulantes no veían nada a causa del enorme humo provocado por las bombas. Inmediatamente después, cazas alemanes de escolta Messerschmitt Bf 109 ametrallaron los alrededores.



Se lanzaron en total 28,22 toneladas de bombas, combinando algunas de gran tamaño (250 kg), de tamaño medio (50 kg) e incendiarias (1 kg). En el aspecto táctico no hubo ninguna novedad ni en el modo de realizar el ataque, ni en los tipos o la combinación de las bombas.

En conclusión:

Guernica era pues un objetivo estratégico, militar. Sin embargo, la forma indiscriminada en que se llevó a cabo el bombardeo lo convierte en un crimen de guerra. El culpable directo sería Wolfram von Richthofen (“en Guernica estuve muy maleducado”, escribiría cínicamente en su diario).

Insisto en que el puente, teórico objetivo del ataque, quedó intacto.

Tras el bombardeo, las tropas franquistas no cercaron al enemigo, así que los planes de Von Richthofen fracasaron. El bombardeo finalmente sólo sirvió para matar a mucha gente inocente.

En contra de lo que se ha dicho durante mucho tiempo, la población no fue bombardeada por su valor simbólico para los nacionalistas vascos. Los alemanes seguramente no tenían ni idea de ese tema, y si la tenían no parece que fuera relevante.

No fue el primer bombardeo sobre la población civil, ni tampoco el peor de nuestra guerra civil.

El número de muertos estaría situado entre los 150 y los 200. En su libro Salas Larrazábal daba la cifra de 126, cifra que la asociación Gernikazarra aumenta hoy a 153. Probablemente sean más. Se ha llegado a hablar de bastante más de mil muertos, incluso de 3.000. Aun así, para una población que entonces tenía cerca de 5.000 personas, 153 muertos es una cantidad considerable.

Durante el bombardeo se destruyó un 15% de las casas, pero como el incendio no se pudo apagar hasta el día siguiente, el porcentaje de edificios destruidos finalmente alcanzó el 70%.

Los franquistas mintieron alegando que la villa había sido dinamitada por las “hordas rojo-separatistas”. Harro Harder, as de caza de la Legión Condor, anotó en su diario lo siguiente después de visitar la ciudad cuando fue tomada:

“Hoy estuvimos en Guernica. Está completamente destruida, y no, como dicen los periódicos de aquí, por hordas de incendiarios rojos, sino por los bombardeos alemanes e italianos. Todos pensamos que es una guarrada escandalosa destruir así una ciudad como Guernica, militarmente irrelevante. Bajo las ruinas yacen todavía varios miles de víctimas, víctimas superfluas. Por todas partes ruinas humeantes, agujeros de bombas, fachadas vacías”.

El bombardeo se hizo mundialmente famoso en primer lugar por el artículo que el periodista británico George L. Steer publicó en The Times y The New York Times el 28 de abril. 



Steer


Steer no fue el único corresponsal que informó del bombardeo, pero sí el que lo hizo de forma más impactante.

También contribuyó notablemente a darle fama al trágico suceso el famosísimo cuadro de Picasso, que representó a España en la Exposición Internacional de París de 1937.



En 1997 el presidente alemán, Roman Herzogreconoció la responsabilidad de su país en el bombardeo.


Discusión:

Acabo de descubrir este artículo de Ángel Viñas, lo que me ha hecho añadir un anexo a esta entrada con fecha 30 de abril de 2015.

En su artículo Viñas se refiere a un libro de la historiadora Schüler-Springorum, “La guerra como aventura”, que yo ya había leído pero que no había añadido a la bibliografía de esta entrada por no ser una obra específica sobre el bombardeo de Guernica, sino acerca del conjunto de la actuación de la Legión Cóndor. No obstante, sí proporciona información de interés sobre el tema de la entrada, así que he rectificado y ya aparece entre las fuentes consultadas.

Viñas, basándose entre otros en el trabajo de Schüler-Springorum, insiste en la teoría de que el bombardeo de Guernica no fue más que una combinación de experimento nazi y de afán franquista por extender el terror, descartando que el puente de Rentería fuese ningún objetivo. En el libro de Imanol Villa aparecen fotografiados documentos que prueban que el ataque a Guernica se pidió por parte de las unidades de tierra franquistas para cortar la retirada al enemigo. Luego, en su origen, el bombardeo tenía un claro objetivo militar, y desde luego el puente debía ser destruido. Fue Von Richthofen quien decidió extender el ataque a la propia Guernica, si bien contó con la autorización del coronel Vigón, Jefe de Estado Mayor de las Brigadas Navarras, para que hiciese lo necesario con el objeto de cerrarle el paso a las fuerzas republicanas. De hecho, en la orden recibida por la Aviación Legionaria italiana, publicada en el libro de Villa, se especificaban dos cosas: que había que bombardear el puente y que, en cambio, no había que bombardear el pueblo “por evidentes razones políticas”. La iniciativa de provocar una masacre entre la población civil fue pues de Von Richthofen.

Ahora bien, lo que resulta innegable es que, por un lado, las autoridades franquistas no tenían problema alguno en masacrar poblaciones enemigas, y por otro, que los nazis aprovecharon la actividad de la Legión Cóndor en España para comprobar los resultados de sus armas y sus tácticas. En este sentido, y como bien apunta la propia Schüler-Springorum, la Luftwaffe no actuó en Guernica de forma diferente a como lo hizo en otros lugares de nuestro país ni a como lo haría en la Segunda Guerra Mundial (en 1939 el propio Von Richthofen arrasaría Varsovia). Así, el 13 de diciembre de 1936 Von Richthofen escribió en su diario: “Poder arrojar por fin nuestras bombas sobre verdaderas ciudades permitiría averiguar los efectos de nuestras bombas, ya que, dado que los pueblos están muy cerca del frente y su conquista es inminente, es de suponer que podremos examinarlos”. Efectivamente, esto se hizo con los pueblos cordobeses de Bujalance, Montoro y El Carpio, bombardeados y tomados en aquel mismo mes. Antes, en noviembre, los bombarderos alemanes habían atacado Madrid matando a cientos de personas, pero la ciudad no sería tomada hasta el final de la guerra.

En el norte de España, los aviones al servicio de Franco gozaron de un dominio casi total del aire, así que pudieron bombardear a placer. El 31 de marzo de 1937 la Aviación Legionaria italiana bombardeó Durango matando a alrededor de 300 personas, una acción bastante más sangrienta que la de Guernica y que ha tenido mucha menos repercusión. Así, escribe Schüler-Springorum:

“Sin embargo, la fijación por Gernika había tenido como consecuencia que la misión de la Legión en su conjunto, y con ella el bombardeo de muchas otras ciudades españolas entre Bujalance y Barcelona, hubieran desaparecido casi completamente de la conciencia histórica. Al discutir durante décadas sobre el puente de Gernika, se estaba evitando un debate público sobre la legitimidad de la intervención alemana en España, como también una evaluación a fondo del modelo operativo de la Luftwaffe, tanto durante la Guerra Civil española como después”.

En cuanto a la falta de reparos de los mandos franquistas en bombardear poblaciones, el propio Franco soltó esta perla en 1936: “Destruiré Madrid antes que dejárselo a los marxistas”. A principios de noviembre de aquel año, sus aviones dejaban caer octavillas en la ciudad que rezaban lo siguiente: “La resistencia es inútil. Ayudad a nuestras tropas a tomar la ciudad. Si no lo hacéis, la aviación nacional la borrará del mapa”. En marzo de 1937 el general Mola lanzó también octavillas amenazando con “arrasar Vizcaya” si los republicanos no se rendían en el norte. Y el 1 de abril de aquel año, el general Queipo de Llano ordenó bombardear Jaén como represalia al bombardeo republicano de Córdoba. Este último mató a 37 personas. El de Jaén a 159.

En resumen, y como escribí más arriba, el bombardeo de Guernica ni fue el primero sobre la población civil, ni tampoco el peor de nuestra guerra civil, aunque con toda probabilidad sea el más famoso. La ciudad sí era un objetivo militar, a diferencia por ejemplo de Jaén, que fue bombardeada antes y con el mero objetivo de castigar a su población en represalia por otro ataque. Esto no quita que Guernica fuese bombardeada también con el propósito por parte de Von Richthofen de probar nuevas tácticas, ni que a los mandos franquistas esto no les preocupara demasiado, ya que ellos mismos recurrían a bombardeos de terror cada vez que les daba la gana.

Aunque el bombardeo de Guernica no fuese concebido para infundir terror, no hay duda de que ese fue su efecto, gracias sobre todo a su eco mediático. Como se leía en la prensa vasca de la época: “¡Ayer Durango, hoy Guernica, mañana Bilbao!”. Con respecto a esta última ciudad, probablemente no se habría entregado casi sin resistencia de no haber existido el bombardeo de Guernica.

Por último, la cifra de muertos en Guernica que da Schüler-Springorum -entre 200 y 1.654- está muy desfasada.


Más información:

-Salas Larrazábal, Jesús, "Guernica", Rialp, 1987 (reeditado por Galland Books en 2012 con el título "Guernica: El bombardeo. La historia frente al mito").

-Schüler-Springorum, Stefanie, "La guerra como aventura: La Legión Cóndor en la Guerra Civil Española 1936-1939", Alianza, 2014.

-Villa, Imanol, "Gernika: El bombardeo", Idem/Expressive, 2008.