Imaginemos que, en esa memorable secuencia, hubiese sido el propio Indiana Jones quien se hubiera puesto toda esa serie de trampas a sí mismo. De locos, ¿verdad? Pues así es a veces mi vida.
Mira, Pedro, yo también tuve un blog, pero murió de inanición... http://cucurruqui.blogspot.com.es/ Lo de locos, no lo sé, pero seguro que de hombres blancos caucasianos sí que es. Un saludo
Mira, Pedro, yo también tuve un blog, pero murió de inanición...
ResponderEliminarhttp://cucurruqui.blogspot.com.es/
Lo de locos, no lo sé, pero seguro que de hombres blancos caucasianos sí que es.
Un saludo
Javier, ya he añadido tu blog a la lista de los molones, a ver si lo resucitamos ;)
ResponderEliminarA ver si así aprendo a escribir
ResponderEliminarEl arte de boicotearse o cómo putearse a sí mismo. San Masoca Tolomeo 3.14 Versículo 5
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